Los demonios que una vez casi destruyeron el mundo, son reanimados por alguien. Para impedir que el mundo sea destruido, el demonio tiene que ser sellado y el único que puede hacer esto es la santa doncella Shion del país de demonios, quien tiene dos poderes; uno sellar a demonios y el otro predecir las muertes de la gente. Esta vez la misión de Naruto es de proteger Shion, pero ella predice la muerte de Naruto. El único modo de evitarlo, es alejarse de Shion, asi la dejaria indefensa, entonces el demonio, cuyo sólo objetivo debe ser matar a Shion lo hará, así significando el final del mundo. Naruto decide desafiar esta «predicción de muerte».